miércoles, 16 de septiembre de 2009

Tarde pero seguro: El Increíble Hulk 2


Título original: The Incredible Hulk (USA, 2008) / Dirección: Louis Leterrier / Elenco: Edward Norton, Tim Roth, Liv Tyler, William Hurt, Tim Blake Nelson / Duración: 112 mins.

Recientemente tuve oportunidad de ver esta secuela de la película dirigida por Ang Lee. Con otro director al mando y un elenco renovado, es evidente que el interés principal que tuvieron sus realizadores fue lograr que ésta no hiciera lo mismo que la anterior: aburrirnos. La película de Lee, más allá de algunas ideas interesantes que tenía a nivel narrativo y visual, resultaba realmente tediosa. Así es que para esta secuela se propusieron dejar de lado el estilo en favor de una historia enfocada principalmente en las escenas de acción. Y lo lograron, alcanzando un producto entretenido, aunque lejos de ser brillante.
Hulk 2, comparada con algunos comics de los últimos tiempos como Ironman y, muy especialmente, The Dark Knight, está un par de escalones abajo. Dramáticamente llano, el film es más que nada una preparación de hora y media para el enfrentamiento final con el villano de turno (el gran Tim Roth, quien brinda una actuación con pocos matices, casi en piloto automático). La historia comienza con Bruce Banner (el siempre solvente Edward Norton) viviendo escondido en los barrios bajos de Brasil, buscando una cura para su "enfermedad". Pero el General Ross (William Hurt) se la tiene jurada, así que cuando una pista indica que Banner estaría en ese país de Suramérica, manda un escuadrón en su búsqueda. Liderando dicho contingente está Emil Blonsky (Roth), una especie de sabueso implacable que no se detiene ante nada. En el centro de la historia también está Betty, la enamorada de Banner e hija de Ross, interpretada aquí por Liv Tyler (en la película anterior era Jennifer Connelly). Por esas cosas poco explicables, Blonsky se toma el asunto contra Hulk a nivel muy personal, llegando al extremo de hacerse inyectar la misma sustancia que Banner tiene en el cuerpo para enfrentarlo "mano a mano", con las esperables consecuencias.

La peli, como dije, no es gran cosa. Si bien llama la atención la solidez del elenco reunido, el guión no deja de ser una excusa para que tengan lugar un par de enfrentamientos a gran escala. Y eso es todo. Eso sí, los efectos están un poco mejor logrados que en la primera entrega, donde el monstruo parecía casi un dibujo animado... En suma, un film que sólo busca entretener (y lo logra) al que no le interesa entrar en implicancias filosóficas ni sociológicas. Desde ya, una vez visto se olvida rápidamente... Pero zafa. Como dirían los fanáticos de Beto Tony y su muñeco: "Está bien!!"